ÑA EMI
BAÑADO NORTE
FOTOS JUANA BARRETO - BARO BRIZUELA
TEXTO BARO BRIZUELA
“La esperanza es esa cosa con plumas que se posa en el alma y entona melodías sin palabras, y no se detiene para nada.
La he escuchado en la tierra más fría y en el mar más extraño, mas nunca en la inclemencia de mí ha pedido una sola migaja.” Emily Dickinson.
Emilia Medina vive en el barrio Tablada Nueva del Bañado Norte. Es ama de casa, madre de 7 hijos y abuela de nueve nietos. Desde los 19 años trabaja en su comunidad por el reconocimiento y respeto de los derechos de la mujer, realizando tareas de apoyo a mujeres embarazadas y talleres de prevención contra el maltrato doméstico.
También trabajó mucho tiempo brindando apoyo escolar a niñas y niños, y es reconocida entre sus vecinos como una referente en su lucha por el bienestar y mejoramiento de las condiciones de vida de su comunidad.
El Bañado Norte es una zona cercana al centro de Asunción, a orillas del río Paraguay, donde se han establecido algunos asentamientos informales, producto del crecimiento económico y urbano, pero al mismo tiempo han sufrido la falta de planificación y de políticas públicas adecuadas que acompañen dicho crecimiento.
Los bañados, en general, están caracterizados por la carencia de espacios públicos, escuelas y hospitales; además de las constantes crecidas del río Paraguay, situación que obliga a los pobladores de la zona a tener que abandonar sus viviendas y reubicarse temporalmente en precarias estructuras de cartón, madera, chapa y hule.
Como dirigente y coordinadora de mujeres del asentamiento donde vive, Ña Emi, como cariñosamente se la conoce, lleva muchos años manteniendo una dura batalla contra la exclusión social de las pobladores del Bañado Norte, peleando por el acceso a una vivienda digna y por derechos tan básicos como el acceso a agua potable y el servicio de electricidad.
Muchas veces se sintió abatida, pero nunca perdió la esperanza, su gran aliada.
“Algunas veces quiero dejar la lucha, pero tengo el aliento de mi familia, de mis compañeras y amigos”
Cuando se desató la pandemia en Paraguay, y el escenario económico comenzó a castigar a los trabajadores informales, Ña Emi no tardó en ponerse el delantal para cocinar en ollas populares, con ayuda de los vecinos, familiares y amigos. Poco tiempo pasó para que se una a otras mujeres en una organización que más tarde se llamaría “Articulación Bañadense de Ollas Populares”, desde donde trabajaron incansablemente desde el mes de abril de 2020 hasta la actualidad para combatir la situación de hambre en los bañados, y luego también en otras localidades aledañas a Asunción.
Ña Emi participó activamente de esta organización que tuvo un papel protagónico en la promulgación de la Ley de Ollas Populares, que establecía la provisión de alimentos por parte del Estado a las ollas populares, que hasta ese momento se abastecían en gran parte gracias a donaciones de la ciudadanía.
A poco más de un año de su promulgación, el gobierno paraguayo ha anunciado la eliminación de los fondos asignados a esta ley, a pesar de que se calcula que las más de 400 ollas populares en todo el país alimentan a unas 20 mil personas. Hasta la fecha no se ha presentado otra propuesta oficial.
Ña Emi y otras mujeres de la articulación de Ollas Populares Solidarias, acamparon durante varios días en la plaza Juan E. O´ leary del centro de Asunción, en señal de protesta y para solicitar que el gobierno revea su postura. Volvieron sin éxito a sus hogares. Antes de eso, habían realizado una manifestación pacífica en inmediaciones del Mburuvicha Róga, la residencia presidencial, donde fueron brutalmente reprimidas por la policía, pese a estar acompañadas muchas de ellas por sus hijos.
“Me siento impotente, muy decepcionada. Siento el dolor de no poder alimentar a los más necesitados, principalmente a los ancianos y a los niños de la zona baja de Laguna Pyta y del asentamiento donde yo vivo.
Otra vez Ña Emi se enfrenta a un futuro incierto. Quizás es otra oportunidad para aferrarse nuevamente a la esperanza, esa fuerza poderosa e inagotable que la llevó a tantas conquistas.